Este tipo de recipiente es muy versátil y se utiliza para almacenar una amplia gama de productos, incluyendo:
Productos Químicos y de Limpieza: Detergentes, blanqueadores, desinfectantes, productos de limpieza concentrados, o soluciones industriales.
Agroquímicos: Fertilizantes líquidos, pesticidas, herbicidas u otros productos agrícolas (estos envases suelen ser resistentes para manejar sustancias agresivas).
Alimentos: En ocasiones, se usa para aceites comestibles, jarabes o incluso leche (aunque los envases para alimentos suelen ser translúcidos o tener un etiquetado más claro).
Automotrices: Líquidos como anticongelante o aceites.